El mercado aeronáutico es un elemento esencial en nuestra sociedad actual, tanto en términos económicos como en relación con el volumen de mercancías y pasajeros que transporta. Según la IATA (International Air Transport Association), las aerolíneas llegarán a transportar 3,6 mil millones de pasajeros en 2016, lo cual supone 800 millones más que los 2,8 mil millones transportados por las aerolíneas en 2011.
El transporte aéreo presta una especial atención a cuestiones medioambientales, el ruido y el cambio climático. Muchas empresas y entidades están trabajando para contribuir a tener un ‘cielo limpio’. La investigación y el desarrollo tecnológico de nuevos productos y procesos contribuye venciendo barreras tecnológicas y aportando soluciones que permitan reducir la huella de carbono de la aviación (p.e: emisiones, ruido, consumo energético) para generaciones futuras.
Los procesos de fabricación aditiva (FA), considerados en muchas aplicaciones como una nueva revolución industrial, son potenciales candidatos a aportar soluciones para conseguir este reto. En particular, las tecnologías de fabricación aditiva de materiales metálicos, tales como ‘Electron Beam Melting’ (EBM), ‘Sintering Laser Melting’ (SLM) o ‘Laser Cladding’ (LC), son las que suscitan mayor interés entre los agentes del mercado aeronáutico. Interés para la fabricación de componentes, caso de los OEM o Tier1; o para la reparación de componentes, caso de los ‘Maintenance and Repairing Overhaul’ (MRO). Estas tecnologías de fabricación proporcionan muchas ventajas en comparación con otros procesos de transformación metálica convencionales.
La tecnología SLM permite fabricar estructuras reticulares o de celosía tanto con piel externa como sin piel. Este tipo de estructuras proporcionan un potencial enorme para conseguir un aligeramiento estructural pero hasta ahora era complicado fabricarlas mediante procesos convencionales. Sin embargo, las posibilidades que ofrece la tecnología SLM se están aplicando de una manera cada vez más patente en sectores donde la reducción de peso y el aumento de la relación resistencia frente a peso suponen una ventaja.
En particular en el sector aeronáutico, esta tecnología está suponiendo una verdadera revolución y se están consiguiendo reducciones importantes del peso y de los costes de producción.
La Fabricación Aditiva proporciona potenciales beneficios para la Industria Aeronáutica. Entre ellos cabe destacar:
- •Un uso sostenible de la materia prima puesto que solo se usa el material necesario para obtener la forma cercana a la final (buy to fly ratio cerca de 1), es posible la reutilización de la materia entre lotes de fabricación, al mismo tiempo que permite reducir el stock de material y las operaciones de tratamiento de residuos.
- Reduce tiempo e inversión porque no se requieren útiles de fabricación.
- Facilita la flexibilidad en cambios de diseño, reduciendo riesgos adicionales.
- Reduce la existencia de almacenes de componentes ya que se puede fabricar bajo demanda.
- Se simplifica la cadena de suministro y por tanto se reduce el tiempo de capacidad de respuesta para la puesta en servicio.
- Disminuye el consumo energético y la emisión de dióxido de carbono al reducir la cadena de suministro.
- Permite la creación de diseños únicos de alto valor añadido solo fabricables mediante estas tecnologías que permiten reducir peso y/o añadir funcionalidad a los componentes. Se pueden fabricar formas complejas incluso con canales huecos internos.
- Permite la fabricación de componentes con aleaciones metálicas especiales en series cortas y bajo demanda.
- Permite la reparación e inspección in-situ, especialmente para componentes con un alto coste y plazo de entrega asociado.