Para la industria del automóvil, la impresión 3D ha abierto las puertas de la creación de nuevos diseños, logrando productos más seguros, más limpios y más ligeros, con plazos de entrega más cortos y menores costos.

Existen dos formas principales en las que la fabricación aditiva puede ser un aspecto crucial en la competencia entre los fabricantes de automóviles y potencialmente ser un elemento distintivo:

1.Innovación de productos: La fabricación aditiva puede producir componentes con menos restricciones de diseño que a menudo limitan los procesos más tradicionales de fabricación. Esta flexibilidad es extremadamente útil permitiendo la fabricación de productos con características personalizadas, por lo que es posible añadir funcionalidades mejoradas tales como cableado eléctrico integrado (a través de estructuras huecas), menor peso (a través de estructuras de celosía), y geometrías complejas que no son posibles a través de procesos tradicionales.

2.Transformación de la cadena de suministro: Al eliminar la necesidad de nuevo utillaje (tooling) y la capacidad de producir directamente piezas finales, la fabricación aditiva reduce el tiempo total de producción, lo que mejora la capacidad de respuesta de mercado. Además, puesto que generalmente la impresión 3D utiliza sólo el material que es necesario para producir un componente, puede reducir drásticamente los residuos y reducir el uso de la materia prima. Además, la impresión de componentes más ligeros pueden reducir los costos de manejo, mientras que la producción bajo demanda y geográficamente cerca de ésta, puede reducir los costos de inventario. Por último, la fabricación aditiva puede apoyar la producción descentralizada de bajo a mediano volumen.

Aplicaciones de la impresión 3D en la automoción

Algunas de las aplicaciones de la fabricación aditiva en el sector de la automoción:

  • Gestión de fluidos: Bombas y válvulas impresas en aleaciones de aluminio con tecnología SLS (Selective Laser Sintering) y EBM (Electron Beam Melting).
  • Proceso de fabricación: Prototipado rápido, personalización de utillaje y herramientas impresas en polímeros, cera o aceros especiales. Las tecnologías utilizadas para este tipo de aplicaciones son FDM (Fused Deposition Modeling), Inkjet (Binder Jetting), SLS (Selective Laser Sintering) y SLM (Selective Laser Melting).
  • Escape/emisiones: Rejillas de refrigeración impresas en aleaciones de aluminio con tecnología SLM (Selective Laser Melting).
  • Molduras exteriores/interiores: Bumpers y rompevientos impresos en materiales polímeros con tecnología SLS (Selective Laser Sintering).

Aunque las técnicas de fabricación tradicionales están profundamente arraigadas en el sector y seguirán manteniendo una posición dominante en la industria automotriz, la fabricación aditiva está ganando terreno poco a poco. Si bien la fabricación aditiva no se convertirá en la única técnica de fabricación en el futuro, tendrá, no obstante, un papel importante en la configuración del panorama mundial de la automoción.